Durante la última reunión del Consejo Internacional de Avicultura (IPC, por sus siglas en inglés), llevada a cabo el mes pasado, sus miembros concluyeron que la Peste Porcina Africana (PPA) y el hundimiento del mercado porcino a consecuencia de esta enfermedad, así como la escasez de los productos derivados del cerdo, podrían impulsar un 3% de forma anual la producción de carne de ave de aquí al 2022.
Paul W. Aho, economista y presidente del IPC, coincidió con las predicciones de Christine McCracken, especialista del Rabobank, sobre que las exportaciones mundiales de productos porcinos serán insuficientes para suplir la demanda de carne de cerdo en China, por lo que se espera que haya un aumento a corto plazo en las importaciones en ese país de otras fuentes de proteína animal, especialmente de carne de pollo.
Si bien es cierto que las principales afectaciones las ha sufrido el país asiático, el virus también tiene presencia en otros países de ese continente, así como en Europa y África, por lo que se espera que la producción mundial de carne de cerdo experimente una reducción igual al 14% de la oferta mundial.
Por otro lado, Aho pronosticó que la producción total de cárnicos porcinos disminuirá hasta 15% en este año, pero podría recuperarse con un incremento anual de 5% en los siguientes cuatro años.
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