Autor: Josué Dávila
Jefe de Investigación y Desarrollo – Addera
Durante el último año nuestra economía se ha visto fuertemente golpeada por la pandemia y, el sector avícola, a pesar de ser uno de los motores más relevantes de la industria de alimentos en el Perú, no ha sido ajena a esta situación de crisis. Es por esa razón, que resulta indispensable optimizar al máximo los recursos que tenemos y realizar inversiones correctas tanto en nutrición y salud animal como en infraestructura a fin de rentabilizar mejor nuestros negocios.
En el caso puntual de la infraestructura en nuestras granjas, el material con el cual se implementa el espacio para la crianza de aves cumple un rol crítico en lo que a bienestar del ave se refiere, y eso por supuesto impacta directamente en su crecimiento y producción.
A continuación revisaremos 4 criterios que, de acuerdo con mi experiencia realizando este tipo de implementaciones en diferentes climas y regiones del Perú, les puedo recomendar consideren al momento de optar por una cortina avícola.
1.Capacidad para ser templada o estirada sin que se rompa el borde
Al momento de instalar una cortina avícola en un galpón, una práctica común es someter la tela a sogas y mordazas, las mismas que son amarradas a camiones o tractores con la finalidad de estirarlas hasta que estén lo suficientemente tensas. Por lo tanto, el primer criterio que debes evaluar al momento de elegir el material apropiado para tu galpón es si la tela es capaz de estirarse sin que se le rompan los bordes.
Para verificarlo, revisa que la tela que te van a instalar tenga refuerzos en los bordes de al menos 10 centímetros por extremo y que no haya sido cortada y soldada, solo así logrará el templado perfecto sin que se rompan los bordes.
Las únicas telas que cumplen esta exigencia son las de tejido plano (Figura 1) ya que no han sido cortadas en los bordes a diferencia de los tejidos circulares (Figura 2) que por su proceso productivo necesariamente se tienen que cortar en el borde.
Figura 1: Refuerzo tela con tejido plano.
Los refuerzos se producen junto con la tela, lo que garantiza poder estirarla sin que el borde se rompa.
Figura 2: Refuerzo tela con tejido
circular. La tela debe ser cortada en el
proceso de producción, y se le colocan
refuerzos de un material más duro que
no permite que la tela sea templada
correctamente.
2. Densidad del tejido
Antes de que optes por invertir en una cortina avícola, es muy importante que te cerciores que se trate de un tejido de alta densidad, esto implica que el porcentaje de cobertura de trama como de urdimbre unan milimétricamente las fibras de polipropileno.
Te recomendamos solicitar una muestra de la tela y exponerla a contraluz, para corroborar que esta no deje pasar cualquier tipo de reflejo o luz, de esta manera evitarás que los cambios de estación distorsionen el crecimiento de tus aves
3. Duración y Resistencia
Este criterio involucra tres características importantes que debes evaluar:
1. Protección UV
Una buena protección UV le dará a tu cortina una vida útil más prolongada y es un factor que se vuelve vital si tu granja se encuentra geográficamente ubicada en una zona con altos índices de radiación solar.
2. Gramaje
La cortina avícola debe resistir el baño con brea viscosa a una temperatura aproximada de 90°C, para que posteriormente pueda ser pintada de blanco. Eso implica que el gramaje de la tela debe ser lo suficientemente grueso para resistir esta intervención. Se sugiere como ideal un gramaje de 140g/m2.
3. Material
Garantiza que la tela que te están ofreciendo no contenga en su producción material reciclado, esto debido a que la degradación del plástico acortará significativamente su vida útil.
4. Revisa todas las alternativas disponibles
A pesar de que la crianza de aves en diversas granjas tienen características comunes, cada caso es distinto y la diferencia principal radica en la geografía, clima y en general en el entorno en el cual se encuentra la granja.
Si bien el uso de cortinas avícolas es el más extendido, hay otros materiales que también podrías evaluar dependiendo de la necesidad. En climas muy extremos, como por ejemplo las granjas ubicadas en la selva, donde las lluvias son intensas y frecuentes, lo más recomendable son las cortinas laminadas que además de la lluvia tienen buena protección contra el viento. También podrías optar por otro tipo de techo o cobertura, como los paneles blancos de UPVC, que son un buen sustituto a los techos metálicos tradicionales.
Además, al ser blancos se logra el efecto de reflejo de la luz, lo que optimiza el aislamiento térmico del galpón y les da mayor bienestar a las aves.
Deja un comentario