bebederos de pollos

Autor: Pedro Morales Chumpitaz1 y Marcial Cumpa Gavidia2

1Ingeniero Zootecnista UNALM

2Profesor Principal, Departamento Académico de Producción Animal – UNALM

Un aspecto muy importante en la producción avícola es el agua, ya que es un elemento que cumple diversas funciones fisiológicas ayudando al desarrollo y crecimiento del ave, la calidad de ésta tiene un fuerte impacto sobre la salud y rendimiento de la parvada. El suministro de agua de calidad cumple un rol fundamental ya que puede garantizar la reducción de agentes contaminantes en ella.

El agua es un nutriente esencial para la vida de todo organismo, constituye el medio para transporte de nutrientes, oxígeno, hormonas, reacciones metabólicas, transferencia de energía; como también de eliminación de desechos, además de lubricar articulaciones y tejidos. Los galpones tecnificados reducen la tasa de mortalidad de las aves debido a la automatización de los procesos para el control de la temperatura, humedad, agua y alimento. De esta manera, se logra asegurar el éxito de la crianza propiciando un ambiente adecuado para la óptima explotación de su potencial genético generando una mayor retribución económica. El objetivo del presente trabajo fue evaluar y comparar dos tipos de bebederos: campana y tetina, en el comportamiento productivo de los pollos de engorde. El bebedero tipo tetina como el tipo campana son automáticos, con la diferencia que el primero es un sistema cerrado donde el agua no está expuesta al ambiente y está más limpia. En cambio, el bebedero tipo campana está expuesto al polvo, cama y materia orgánica del galpón por lo que el agua tiene mayor riesgo a contaminarse y requiere de mayor cuidado.

El Cuadro 5 muestra los costos totales para la implementación de un galpón (200 x 16 m) con equipos y bebederos de cada tipo. En ambos casos se tomaron en cuenta los costos referentes a materiales y construcción del galpón. Según el análisis, observamos que el costo del galpón equipado con bebederos tipo tetina es más elevado que un galpón equipado con bebederos campana, existiendo una diferencia de S/ 20 224.08.

Los Cuadros 6 y 7 muestran el costo de pollo producido usando cada tipo de bebedero, para lo cual se han tomado en cuenta los costos de los insumos utilizados para la crianza. También se han tomado en cuenta los costos de depreciación de infraestructura y equipos.

Fuente: Elaboración propia.

En relación al costo de pollo producido usando cada tipo de bebedero, los costos de consumo de agua se reducen en S/ 0.03 al usar el bebedero tipo tetina, dado que hay un uso más eficiente del agua con el bebedero tipo tetina y en cambio, hay desperdicio de agua con el bebedero tipo campana. De otro lado, en cuanto al costo de depreciación por campaña según el tipo de bebedero, el costo es ligeramente mayor en el sistema de bebedero tipo tetina.

En un galpón de 200 metros de largo por 16 de ancho (con cuatro metros de parqueo) solo se toma el área sin contar el parqueo para obtener la densidad (200 por 12 metros). Con el sistema tipo tetina podríamos criar hasta una densidad de trece aves por m2 y en uno con bebedero campana hasta once aves por m2. Ésta diferencia en la densidad reduce los costos de limpieza y desinfección de galpón por pollo, así mismo los costos de material de cama por ave. Los bebederos tipo tetina no limitan el movimiento del ave y optimiza el área de crianza aumentándose la densidad de aves por m2, lo cual se traduce en mayor producción de kg de carne al término de la campaña.

En el presente ensayo se pudo aumentar la densidad de 11.17 a 12.01 aves/m² por el uso del sistema de bebedero tipo tetina. De otro lado, se pudo observar que la mortalidad disminuye considerablemente usando el sistema de bebedero tipo tetina versus el bebedero tipo campana, esto se debe a que el ave toma agua directamente de la red a diferencia del bebedero tipo campana que está expuesto a residuos de cama y materia orgánica. Esto concuerda con lo que manifiesta Rubio (2005), sobre la influencia de la calidad del agua en los parámetros productivos.

Una calidad microbiológica incorrecta va a permitir el ingreso de patógenos tales como E. coli, Salmonella, Clostridium, etc. El control de la carga bacteriana es mucho más difícil en sistemas de bebederos abiertos (campana), ya que están expuestos a la contaminación por polvo fecal y por las secreciones orales y nasales de las aves al beber. En ambos sistemas de bebederos si no se les da un mantenimiento adecuado a las tuberías de agua, se producirá una concentración microbiana que afectará el rendimiento de las aves, reduciendo la eficacia de la medicación y vacunación, en el sistema de bebedero tipo tetina también afecta el caudal de agua. Implementando un sistema de desinfección regular del agua y un programa de limpieza de tuberías se evitará la concentración microbiana.

Los sistemas cerrados de bebederos de tetina tienen la ventaja de reducir la diseminación de enfermedades, no obstante, es necesario dotarlas de un higienizador que sea efectivo ante la presencia de materia orgánica y de la película orgánica (biofilm) y utilizarlo con regularidad. Otros medios eficaces de controlar la concentración bacteriana son, por una parte, la cloración entre 3-5 ppm al nivel de los bebederos (utilizando, por ejemplo, dióxido de cloro), o radiaciones UVA. Estos tratamientos deben aplicarse en el punto de entrada del agua en la nave. (Ross Tech, 2008). No existen diferencias en peso promedio de las aves con respecto al tipo de bebedero, esto probablemente depende de la calidad de insumos en la dieta que se le brinda al animal. Tanto el peso del ave como su ganancia diaria también dependen del consumo de alimento y la disponibilidad de agua, ya que éstos guardan una relación 1:2.

El consumo de alimento está influenciado por el apetito del animal, el cual está muy relacionado con el desempeño en el crecimiento de los pollos de engorde. Los pollos de engorde desarrollan todo su potencial genético a menos de que consuman todos sus requerimientos de nutrientes a diario. Además, de una formulación de la dieta adecuada, el mantenimiento de una máxima ingestión de alimento es el factor más importante que determinará la tasa de crecimiento y la eficacia de utilización de los nutrientes.

El consumo de alimento también está influenciado por la disponibilidad de agua en el galpón, la falta de ésta puede llevar a la desuniformidad del lote. Según Quishpe (2006), los pollos de engorde beben al menos el doble de agua que la cantidad de alimento consumida con base en el peso.

El consumo real de agua en relación al consumo de alimento varía dependiendo de la temperatura ambiental y factores de la dieta. Los sistemas cerrados de suministro de agua mejoran la conversión comparado con los bebederos abiertos o de campana. La razón para esta mejoría, está relacionada con la calidad del agua. El agua en los bebederos abiertos o de campana está expuesta al polvo, a la cama, al alimento y al material fecal. Por esta razón, el agua de los sistemas abiertos como los bebederos tipo campana contiene generalmente gran cantidad de bacterias lo que produce mala absorción del alimento, diarrea y otras enfermedades en los pollos.

El agua de los sistemas cerrados está protegida de esta contaminación. Es vital para la conversión alimenticia que el agua esté limpia y fresca. Donde el agua esté contaminada, es seguro que los pollos serán de una calidad inferior. Además, puede generarse mayor riesgo de cama húmeda favoreciendo la esporulación y brotes de coccidias que dañan directamente el intestino delgado, lugar donde se absorbe la mayor cantidad de nutrientes.

El consumo de agua influye sobre la tasa de crecimiento. Un suministro deficiente de ésta, ya sea por falta de bebederos o por volumen brindado va afectar la performance del ave. Las aves consumen más agua cuando la temperatura ambiental es elevada y disminuye cuando el clima es frío.

El requerimiento de agua incrementa en 6.5% por cada grado centígrado por encima de los 21°C. En ambiente cálido (verano) conviene realizar flushing con intervalos regulares, a fin de asegurar que el agua esté lo más fresca posible.

En el uso de bebedero tipo tetina se recomienda una por cada doce aves. Es necesario manejar diariamente las líneas de agua durante el desarrollo del lote para obtener el rendimiento óptimo. Se debe tener en cuenta la presión de agua, ya que, si es demasiado alta, en la línea de bebederos se pueden producir derrames y cama húmeda afectando la salud del animal, desarrollando podo dermatitis u ocasionando problemas respiratorios por producción de amoniaco. Si la presión del agua es demasiado baja se puede reducir el consumo de ésta y, por tanto, de alimento. Se debe tener cuidado en la altura de la línea de tetinas. Estas al inicio deben ser bajas e ir aumentado conforme se incrementa la edad de las aves.

Una línea de tetina demasiado alta puede restringir el consumo de agua, pero si está demasiado baja puede mojar la cama. Con respecto al uso de bebederos tipo campana se recomienda usar un mínimo de seis bebederos por cada mil pollitos, adicionando seis tonguitos por cada mil aves. Conforme el pollo crezca se debe proporcionar un mínimo de ocho bebederos por cada mil aves.

Los bebederos deben ser distribuidos homogéneamente por todo el galpón. El nivel de agua debe estar 0.6 cm debajo del borde del bebedero hasta los diez días, después de los diez días el nivel de agua debe ser 0.6 cm. Al igual que en el caso de bebedero tipo tetina, éstos deben tener una altura adecuada durante toda la vida del ave, el borde de la canaleta circular del bebedero debe estar a la altura del dorso.

El sistema de bebedero tipo tetina disminuye el consumo de agua en granja porque se evita el cambio constante de ésta, como ocurre en los bebederos tipo campana al momento de lavar el equipo. Además, hay un mejor control del agua debido al uso de reguladores de presión y caudal. El lavar los bebederos tipo campana, supone que el personal dedique dos horas al día a esta labor. Calculando que la crianza dura 42 días, esto equivale a 84 horas por campaña, prácticamente 10.5 días que pueden ser utilizados a un mejor control de temperatura y ambiente.

El índice de eficiencia europeo (IEE) fue mejor con el uso de bebederos tipo tetina, esto demuestra que los factores de producción fueron manejados correctamente.

Las conclusiones del presente trabajo son:

  1. El uso de bebederos tipo tetina disminuye la conversión alimenticia en 0.14 comparado con el tipo campana, es decir, mejora la ganancia de peso por kg de alimento consumido.
  2. Con el sistema de bebedero tipo tetina se evita las posibles pérdidas de vacunas y tratamientos sanitarios, por lo tanto, no hay desperdicio de la medicación y se reduce el desperdicio de agua por lavado de equipos en 1.1 litros por ave.
  3. Con los bebederos tipo tetina la cama se mantiene más seca, esto reduce considerablemente los niveles de humedad y por ende los valores de amoniaco en el galpón.
  4. Se evidencia la disminución de la mortalidad al usar bebederos tipo tetina con respecto al bebedero tipo campana, ya que existe menos contaminación bacteriana a diferencia de los bebederos tipo campana.

Las recomendaciones del presente trabajo son:

1. Instalar bebederos tipo tetina, porque mejora los índices productivos y facilita el manejo en pollos de carne.

2. Tener en cuenta la pendiente del galpón para la instalación de bebederos tipo tetina, porque las diferencias de ésta pueden ocasionar variaciones en la presión de agua, lo que podría generar cambios en los patrones de consumo de agua en los pollos y humedad en cama.

Para revisar la primera y segunda entrega del estudio, ingrese a los siguientes enlaces:

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